lunes, 21 de marzo de 2011

Harbour Bridge


Dicen que toda persona que viene a Australia y hasta los propios australianos tienen que cruzar alguna vez en la vida el harbour Bridge, pues bien aquí está mi travesía por el puente. A medio camino me comenzó a llover a lo bestia por lo que tuve que aligerar el paso.

Me he dado cuenta que en este vídeo tengo la voz del puto Iniesta,jajajajajajaja.

sábado, 12 de marzo de 2011

CURIOSIDADES

Camisetas del Barça vistas:  16
Camisetas del Madrid: 13
Camisetas de la selección: 9

-El clima tropical me está volviendo loco. Te levantas con calor por la humedad extrema pero está nublado, de repente sale el sol y si no estás protegido te quemas (aquí no hay capa de ozono), sobre las 16h comienza a llover y no para hasta la noche pero muy muy tarde.
- Es un gustazo pasar 3 días sin ropa interior. Playa, piscina, playa, piscina, playa, piscina.....
-Estar en el barco y ver de repente que rodean el barco como 15 tiburones acojona pero más cuando sabes que al día siguiente vas a estar en el agua y seguramente puedas ver a alguno.
-Mis nuevos compañeros de habitación en Cairns son holandeses y muy majetes aunque no hay noche que no se vean 3 películas y se beban medio cartón de vino.
-Después de tanto tiempo sin hacer deporte me planteé salir un par de veces por Cairns a correr pero después de la 1a las agujetas me han dejado muy muy tocado.
- En los supermercados no venden alcohol pero siempre hay una tienda de venta de alcohol cerca y no comienzan a venderlo hasta las 4 de la tarde aproximadamente. Al menos quieren mantener a la gente serena durante la mañana.

Surfers Paradise y paradita en Byron Bay

La llegada al aeropuerto de Colangatta fue de las mejores, pese al jaleo que había en el avión con unos 3 niños llorando a la vez, al salir a recoger mi maleta ya me estaban esperando mis familiares para recogerme. Los 2 llevábamos la camiseta de España para así vernos rápidamente. Nos saludamos y nos pusimos rumbo a Surfers Paradise que estaba a unos 15o20 minutos de coche. Joaquín de copiloto, conduciendo Alicia y conmigo atrás la pequeña Mónica. Viven en una zona muy cercana a Southport y la playa más cercana de la zona es Main Beach, es decir que no están metidos en todo el jaleo de Surfers Paradise que como dice la guía en este lugar se trata de beber, beber y beber aunque uno de sus atractivos son las grandes olas para hacer surf y también hay numerosos barrios residenciales donde viven de forma más tranquila.
Al llegar por la noche nos pusimos a charlar y nos dieron las tantas. Cuando te encuentras una familia de españoles que hace más de 30 años que no pisan su tierra pues siempre tienen cierta curiosidad y uno se alegra de hablar bien de su tierra aunque no siempre es posible.


La primera visita turística que hicimos fue llegar al llamado Spit, un lugar muy bonito. Es una lengua de arena que resguarda del océano. Está en Southport el cual es la entrada septentrional a la Gold Coast (no es un lugar particular, es como decir la Costa Brava en Cataluña). El lugar en sí es mucho más tranquilo que Surfers y con hechar un vistazo a los alojamientos y restaurantes ya notas la diferencia. Bajamos al sudeste hasta la la playa de Main Beach donde pude darme un chapuzón ya que hacía un día genial.


Durante estos día el calor era realmente agobiante y la humedad extrema por lo que mejor que podíamos hacer era pasar el mayor tiempo posible, sobretodo al medio día, en los centros comerciales que sin ser nada del otro mundo le dan mil vueltas a los que tenemos España a nivel de organización, etc. Viendo el nivel de precios que tenemos puedo decir que la ropa para ellos es muy muy barata ya que tienen un sueldo de media 1/3 superior al nuestro y la ropa tiene el mismo precio que en España.
Vistas desde el Spit de Surfers Paradise
Por otro lado no hay restaurantes económicos ya que un plato te cuesta como 17 euros aproximadamente sin contar que luego tienes que pagar bebida, postre o café a parte. Así que tiramos bastante de Mcdonalds, Hungry Jacks(es como burger king) y así de paso podíamos dar un paseo por la playa al acabar.


Por las noches cena a lo grande, como hacía tiempo que no tenía. Ensalada y luego con plato principal y pan, postre como en España. Un día tortilla de patatas, otro albóndigas, carne.... Pues como en casa en España, un lujo. Por la mañana levantándome bastante tarde o si había fútbol pues a verlo ya que en la casa éramos todos bastante fanáticos. Pues después de tanto tiempo de compartir habitación con tanta gente y no poder ver fútbol y comer medio regular pues se agradece mucho.


Surfers Paradise no tiene un gran atractivo turístico en mi opinión pero si vienen 2 millones de personas anualmente por algo será. Altos edificios de apartamentos, la costa altamente urbanizada, relaciones públicas de las discotecas en cada esquina. Tiene su particular encanto pero no es el momento para pegarme grandes fiestas ya que estoy en plan familiar y no tengo transporte para desplazarme hasta el centro de Surfers y aparte que no me apetece(quien me ha visto y quien me ve...). Para fiesta ya tengo mi Barcelona y prefiero pegarme las fiestas con mi gente. Aquí un cubata te pueden soplar 18 dólares y mira que te lo ponen con medidor osea que ni el precio, ni las compañías ni el transporte acompañaban por lo que opté por estar 5 días en plan relax.


Ya tenía en la cabeza el tema de visitar Byron Bay desde hace tiempo pero era un poco como retroceder. Ya estaba hacia el centro sur de Queensland y Byron Bay quedaba como a 70km más al sur ya perteneciendo a otro estado (NSW, el mismo que Sydney). Pero me comencé a mirar el transporte y a leerme la guía y el lugar llamó mi atención. Así hippylondio, rollo surf y deportes de aventura, un mirador con un faro increíble.......Pues me decidí rápido a tirar hacia allí. Reservé para 3 noches pero no hubiera estado de mñás estar una semanita aunque ya el gasto se me hubiera ido de las manos seguramente y también me apetecía estar en Surfers con la family un par de días más antes de tirar hacia Cairns.

Me hacercaron a la terminal de bus en el centro de Surfers Paradise y al cogerlo el conductor me dijo que hacía el tramo de la tarde sólo por mí. Al subirme al bus me dí cuenta que iba solito osea que más espacio imposible.


Llegas a la costa y ya te encuentras ante ti una estética alucinante donde hay elevadas y verdes depresiones que se encuentran con la costa de forma espectacular. Aunque más que por esta razón turística la verdadera razón es la evasión de la realidad que ofrece. Un estilo de vida diferente en plan hippy pero a la vez como muy trasquilo. Vienen a desconectar, entonarse y broncearse tanto como si vienen un fin de semana como si vienen para toda la vida.
Es el típico pueblo (9000habitantes) que te puede parecer como un gran tumulto de gente en temporada alta que te puede llegar a agobiar pero en mi caso en temporada baja me pareció un lugar fantástico con cálidas temperaturas, interminables playas, lugares baratos para comer, animada vida nocturna y ambiente despreocupado.
Llegué a mi habitación del hostal con mi camiseta de la selección española y lo 1o que me encuentro son 5 holandeses mirándome con una cara de mala ostia increíble. Sólo uno me dirige la palabra y me dice, un poco con la coña, que no comente mucho el tema del mundial de fútbol. Poco después llegó un italiano con el que me llevé bastante bien aunque para mi desgracia cambió de hostel al día siguiente. Barajaba varias alternativas aunque una era asegurada: visita al Cabo de Byron donde se encuentre el faro de 1901, el más potente y oriental de toda Australia. Otras alternativas pasaban por hacer un par de días de curso de surf o quizás coger una mañana entera un kayac para hacer una ruta con monitor por la preciosa costa. Enseguida descarté las 2 últimas, una por cara y la otra porque de los 3 días (cuento 2 porque llegué por la tarde y me fui por la mañana) uno me hizo lluvia sin parar y el otro decidí partir la playa y coger algo más de color.
Pues el 1r día que salgo con mi bañador puesto, con mis 2 sandwich  en una bolsa, la toalla (la única que me queda) y mi crema del sol pues llego a la arena y al extender la toalla el diluvio universal... Decidí tomarme la mañana en el hostal y ya por la tarde recorrer la interminable playa. Por la tarde, ya sólo chispeando, me puse a caminar por la playa y cuando llevaba como 2 horas sin parar de tirar fotos me decidí tirarme al agua. Que más da si está chispeando, había gente en el agua y ésta estaba la mar de caliente por lo que no me lo pensé. Por la noche hice unas amigas italianas que estaban bastante chifladiyas pero pasé un buen rato.
Al día siguiente hablando con mi amigo David de Logroño por el facebook me cuenta que está en Byron Bay. Menuda casualidad! así que pasamos la mañana en la playa de Main Beach ya que hacía un día espectacular de sol y al ver la gente que había en la playa y el ambiente me pareció que aquello era Ibiza.
Me decidí a subir al faro después ya de comer. La guía dice que son unos 4 km pero es todo subida y bajada y en vez de ponerme las botas de caminar pues recién salidito de la playa me pongo a ello con mis superchanclas. Al llegar a la cima ya habiendo quemado el desayuno, la comida y todo lo que tenía en el cuerpo y con la cantimplora vacía me planto delante del faro y alucino con las vistas.  Para llegar al faro atravesé la playa de Clarkes en el extremo de Main Beach. Al otro lado del faro, en el oeste estaban las desierta playa de Belongil. Bueno si me pongo a enumerar las playas que vía desde el faro no acabo...
Por la noche quedé con David para ir al lugar de moda para los mochileros "cheekey Monkeys". Ya el nombre me tiraba para atrás pero bueno para tomar un par de cervezas tampoco pasa nada. Antes de entrar encontramos 3 catalanes y me pongo a charlar un rato con ellos. Nunca me había sentido tan feliz de escuchar a gente hablando en catalán. Me mucha alegría el escucharlos y su aventura también traía tela pero no viene a cuento.
dentro del lugar una mezcla de chalaos del lugar ya veteranos con una multitud de niños de unos 18/20 años dentro con una buena taja. Comienza la fiesta con 5 tías en el escenario sin nada arriba y con las banderas de sus respectivos países pintadas en su desnuda piel. Concurso a ver cual está más buena midiendo los gritos de la gente... Enfín, entretenido.
Sin ser demasiado tarde ya decido volverme al hostal ya que al día siguiente tenía que coger el bus no demasiado tarde y tengo mala experiencia cuando me preparo la mochila con prisas.
Al día siguiente me despedí de David y rumbo de nuevo a Surfers Paradise donde mi family me prometieron una paella.
De Byron Bay me quedo con su clima, con el buen ambiente y un recuerdo de ciudad de vacaciones aunque por otra parte también me quedo con la visión de mucho turismo de pasta que vienen a hacer terapias naturales alternativas los cuales alquilan grandes mansiones o como mínimo lujosos apartamentos. También me gustó el pasear por la noche ya que cada 2 pasos te encuentras a músicos en la calle ganándose la vida tocando en la calle y algunos son realmente buenos.

Llegada a la estación de Surfers y me voy a comer algo antes de que me recojan y así de paso hago algo de turismo por el centro y veo un poco el ambiente (lloret de mar) del lugar. Enseguida me recoge mi prima y vuelta a mi casa de allí.
Domingo perfecto ya que puedo ver el partido del barça temprano por la mañana y luego a comer y pasear por la bonita Main Beach donde hay un torneo de volleyball y se ven las familias en los numerosos puestos de barbacoas (domingueros).
Por la tarde/noche ya se ponen a hacer la paella y la pinta me va dando una alegría volver a ver la elaboración de una paella. Ya por la noche nos ponemos a comer y la verdad que está buenísima. Se nota que los cocineros son profesionales de la cocina y a la vez españoles, mejor imposible.

Al día siguiente a coger el avión otra vez. Me voy hacia el norte pero siguiendo en la misma Queensland donde el clima es tropical y promete ser muy bonito el paisaje y entretenidas las escursiones a realizar allí. Me voy muy contento de haber realizado esta visita. Es bueno saber que tienes gente en la otra punta del mundo dispuestos para acogerte.

miércoles, 9 de marzo de 2011

Tasmania, paraíso natural

 Ya a la espera de recoger mi mochila se acerca una seguridad con un perro y dice que no podemos llevar nada de frutas, verduras, etc. Por lo visto esta gente quiere estar protegida 100% de cualquier pasa transmitida por la comida. Total que lo único que llevo es una par o o 3 de ajos y con toda mi buena fe se los enseño para tener que tirarlos al momento.
Al encontrarme con mi amigo David(el de Logroño) ya nos dirigimos al hostal y al llegar la recepción está cerrada por lo que nos metemos con toda la cara y de gratis fuimos a investigar un poco lo que teníamos que ver en Tasmania y posteriormente dormir en un sofá que había en la sala de estar.
Mirando la Lonely Planet (la guía) ya vemos que el tema del transporte público es bastante complicado por lo que hay que ir mirando los lugares cercanos a donde estábamos alojados, Hobart que es la capital y a la vez la 2a ciudad más antigua de toda Australia.

Bueno un resumen de lo que viene a ser Tasmania: fue descubierta por un navegante holandés, Abel Tasman de ahí el nombre. Tiene una extensión parecida a la de Portugal por lo que no es una simple islita perdida por Australia. A sus habitantes se les conoce con el nombre de Tassies de forma cariñosa. Tiene una historia bastante trágica entre que a sus principios existían las cárceles más famosas de británicos en su interior hasta la guerra sucia contra los pobres aborígenes. Con decir que no queda ni uno, se los pulieron a todos en las llamadas Black Wars. Casi toda la gente habita en la costa septentrional y sudoriental, en cambio en la costa occidental y sudoccidental  se encuentran salvajes, desoladas y remotas. Tierra adentro, las selvas tropicales y los montes del sudoeste forman unas de las últimas grandes zonas vírgenes del mundo, prácticamente todas son Patrimonio Mundial, casi nada...

Después de pegaros el rollo vamos a explicar a lo que dediqué mis 12o13 días en Tasmania. El primer plan era visitar el monte Wellington que no estaba muy lejos, luego quizás una excursión organizada a Mt Fields y poco más porque las excursiones para ver 3o4 sitios se iban a los 500 dólares o más. En la oficina de turismo nos dijeron que sin coche era complicado ver mucha cosa sin tener un gran presupuesto y mucho tiempo.
De momento decidí hacer la ruta de la Loly Planet que te ayuda a visitar los mejores lugares de Hobart en apenas 3 horas. Vimos el Parlamento, la plaza de Salamanca, el barrio de Battery Point (donde desubrí el restaurante español "Francisco´s"), el ayuntamiento, la oficina de correos y poco más.
Al regresar al hostal vimos que habían organizado una Barbacue de estas que les gustan tanto a los australianos y claro no la íbamos a desperdiciar. Comenzamos a charlar con la gente del hostal. Cada uno te cuenta lo de siempre, cuanto llevan es Australia, que han visitado, etc, etc pero encontramos a un par de personas que habían alquilado un coche y habían visitado toda la isla en 5 días. Nos abrieron los ojos y de repente nos planteamos hacer lo mismo. Enseguida encontramos una compañera más de viaje y nos plantemos coger y alquilar el coche durante una semana y vivir en él sin tener que pagar alojamiento y a la vez entrar a los parques naturales sin pagar. El coche solo salía por unos 50 dolares al día así que nos pusimos en marcha. Compramos provisiones para unos 3o4 días y preguntamos a los chicos que ya había hecho la ruta que qué era lo que más les gustó para así nosotros hacer algo parecido aunque con un día más que podíamos gastar en no pegarnos madrugones sino en vivir un poco más relajados.

Llego el día de coger el coche y ponernos en marcha. Éramos una francesa llamada Anne, el de Logroño David y yo porque a última hora nos falló una japo que se quería apuntar. Al final con las historias de las fiestas de despedida y tal se me pasó lo de hacerme el carnet internacional para conducir por lo que no iba a tocar el volante (no lo he hecho desde hace 3 meses).
La idea era visitar los parques naturales más famosos y parar en una de las 3 ciudades más grandes e importantes de Tasmania que a la vez tuviera algo cerca que ver también bonito y esa ciudad fue Lauceston.
La última noche antes de comenzar nuestro particular tour fuimos David y yo a cenar a un sitio recomendado por la Loly Planet por esta razón los lugares suelen ser más caros pero no lo fue esta vez. Se llamaba Flippers Fish Punt y por unos 14 dolares por cabeza nos pusieron un cucurucho de fritanga de pescado que estaba bastante bien (aunque como los cucuruchos de la freiduría de Jerez no hay ningunos).
A la mañana siguiente nos pusimos en marcha, primer destino fue llegando hacia la costa este y llegamos a Coles Bay y posteriormente ya pasaríamos el día en Freycinet National Park. La francesa conduce de coña por la izquierda!! En todos estos lugares te exigen un pase por coche de unos 60 dólares pero no estábamos por la labor así que no parábamos en el centro de visitantes donde todo el mundo paraba a coger mapas e información y pasábamos de largo para encontrar algún parking público donde aparcar y pasar la noche. Antes de anochecer fuimos a una calita que os encontramos por casualidad y allí vimos en el agua una raya gigante que nos espantó ya que parecían aletas de tiburones pero tan a la orilla era imposible. La primera sorpresa fue el recibiemiento de los wallabies(pequeños mamíferos con forma de canguro) en el parking donde se acercaban algunos sin ningún miedo hasta estar pegados a nosotros. Decidimos cenar a la orilla de esa magnífica cala.
El menú de los siguientes días iba a ser sandwich y algún que otro capricho al llegar a Lauceston. Ya después de dormir bastante incómodos, nos levantamos temprano para realizar la ruta hacia la bahía de Wineglass, la ruta de ida y vuelta rondan las 3 horas y es bastante dura. Primero un ascenso por escaleras hasta el mirador de la bahía, donde hicimos buenas fotos y posteriormente descendimos por el otro lado hasta bajar a la playa. Se dice que es la playa más fotogénica de toda Australia y no me extraña. Al llegar con unos sudores del esfuerzo considerable decidí tirarme a la helada agua pero no tardé demasiado en salirme.

Wineglass Bay



Siguiente parada, Lauceston. Al llegar me pongo a mirar donde está el parque natural y no sin perdernos un par de veces nos encontramos que está dentro de la misma ciudad hacia el oeste por lo que por primera vez podremos visitar un parque natural y a la vez tener un poco de vida nocturna. El pueblo se encuentran en la cuenca de un par de ríos que se unen para formar el río Tamar. Se nota que esta ciudad no es tan cosmopolita que Hobart, que ya es decir.


Primero nos dirigimos Caratact Gorge que es donde está el desfiladero de Cataract. Nos quedamos maravillados ya que hay una piscina gigante y gratuita, unas 4 barbacoas para cocinar y un telesilla que cruza la cuenca de la First Basin (un lago gigante que está pegado a la piscina). Nos dirigimos al centro de la ciudad a comprar algo de carne y rápidamente nos ponemos las botas en las barbacoas eléctricas que hay en el parque. Al acabar, al haber tomado un par de cervezas de más, a la francesa se le mete en la cabeza el salir por ahí a seguir la juerga y a nosotros nos parece bien. Nos metemos en un pub donde hay muy buen ambiente y parecemos ser la atracción de numeroso grupos ya que vienen a preguntarnos de donde somos y que hacemos en un lugar como Lauceston un sábado noche. Enfín, que pasamos un buen rato hasta bien entrada la madrugada cuando volvemos al coche a dormir algo. Al llegar el día vamos a comenzar una nueva ruta de unas 2 horas que te lleva de la 1a a la segunda Basin y a la antigua central eléctrica Duck Reach. Las vistas son increibles. Al volver chapuzón en la piscina que resultó estar muy muy fría y continuamos la ruta.



La siguiente parada Craddle Mountain National Park, tiene un área de unas 168000ha y llega al lago St Clair declarado Patrimonio Mundial. Para llegar al lago Dove que es de donde parten todas las rutas importantes tenemos que pasar una barrera, esta solo se abre cuando en tu coche llevas la pegatina de visitante y haber pagado por lo que tenemos que esperar en una subidita en el lateral(para evitar la foto de la cámara de seguridad) y esperar que llegue algun coche para así pasar a la vez que él. Chanchullos para no pagar nada.... Entramos y hacemos unas fotos en el lago con los picos de la Craddle Mountain de fondo. Estamos emocionados de las supervistas que hay en el horizonte pero decidimos pasar la barrera para ir a dormir al exterior para no buscarnos problemas. Nos metemos en otro lugar con barbacoas y despues de una cena razonable vamos al coche a dormir cerca del centro de visitantes(marronetis total). Cada ncerca de donde está la barrera de seguridad. No paran de aparecer animales por todos lados, es como si cesara el toque de queda a las 9pm y todos los animaliyos fueran a visitarnos. La sensación de estar rodeado mientras duermes es algo real.
Al amanecer nos ponemos en marcha para volver a hacer el chanchullo de pasar la barrera por el lateral y lo conseguimos. Aparcamos y yo dejo un tiquet de la compra del supermercado para que parezca que hemos pagado entrada y tal y nos ponemos rumbo para comenzar la caminata de unas 4,5 horas que a la postre se convertirían en 6h. Existen docenas de rutas para hacer, la más famosa es la Overland de 80km que comienza en Ronny Creek y acaba en el lago St Claire pero no vamos a hacerla porque ni llevamos tiendas ni ropa de abrigo ni un coche que nos recoja en el final de la ruta por lo que nos decantamos por esta intermedia que nos había recomendado unos portugueses(uno hablaba catalán?¿?...) muy simpáticos el día antes. Si dábamos la vuelta al lago Dove eran solo unos 8,5km y era de nivel verde(el más facilito) pero en vez de hacer esa nos desviamos por una de nivel naranja y rojo hasta volver a parar a la zona del final del lago que ya prometía ser una odisea. Yo cuando ví los primeros desniveles de barro y donde teníamos que ayudarnos de las manos para subir por la roca ya les dije que no me parecía buena idea pero bueno ahora me congratulo de haberlo realizado aunque era pa habernos matao... y además sin  nadie saberlo porque no nos inscribimos en la oficina para no pagar. Bueno que a medio camino escucho a alguien que dice: "no eperaba encontrame a ningún epañó en Tasmania y menos en la Craddle Mountain", Coño que es un español!! Se llama Luis y es de Málaga. El chaval nos escuchó hablar en español y paramos a charlar un rato con él ahí en medio de la subidita vertiginosa.
A medio camino paramos a comer una naranja, David está asfixiado pero no renuncia a fumarse su piti y yo me decido a ir tirando y esperarles unos metros más adelante ya que no me quería enfriar con el sudor y con las moscas ahí en medio de la nada. Quería llegar a la cima cuanto antes porque luego tocaba volver al borde del lago y pegarnos otra caminata hasta llegar al coche. Llegamos hechos caldo pero ha merecido la pena. Hemos visto como 6 lagos diferentes bordeando y llegando casi a la cumbre de Craddle Mountain a unos 1300 metros de altura por lo que hemos subido a unos 900 aproximadamente. Se dice que hay que ir abrigado y preparado para la lluvia para estas rutas, se dice que da igual la época del año ya que llueve 7 de cada 10 diez días, está nublado 8 de cada 10 y nieva 54 y el sol brilla sólo 1 de cada 10 días. PUES TOMA CASTAÑA!!! todo el día con un sol de narices y un calor que nos faltó como un litro de agua y acabamos la ruta con la boca sequísima y pasándolo un poco regular.

Próxima parada Cynthia Bay donde se encuentra Lake St Claire donde finaliza la famosa Overland que no realizamos finalmente(solo por hacerla te cobran 120 dolares). Como 4 horas de coche por lo que llegamos tarde y apenas cenamos a dormir ya que el día siguiente queremos ver el lago con calma. Dormimos bastante ya que el día siguiente había sido bastante duro. Ya llevamos días viviendo bastante al límite y nos permitimos el capricho de tomarnos un café en el centro de información cerca del lago y nos soplan 5 dólares por cada uno. A David se le mete en la cabeza el tema de conseguir una caña de pescar(niñerías) y a mi no me desagrada la idea tampoco por lo que gastamos la mañana por ahí perdidos intentando conseguir una para al final no conseguir nada. Total que al final me voy con la francesa a hacer el recorrido alrededor del lago. Decía que había serpientes bastantes venenosas y todo la gente con la que nos cruzábamos nos preguntaban a ver si habíamos conseguido ver alguna y al final zas! vimos una negra pasar cerca nuestro por el camino. Luego fuimos a visitar la zona del lago donde viven los Platypus que vienen a ser como ornitorrincos(cuerpo de conejo y cabeza de pato, una paranoia). Comemos un sandwich(para variar) rodeados e invadidos por abejorros gigantes y demás y seguimos la ruta en coche.

La siguiente parada ya es bastante cerquita de Hobart a unos 80km, es el Mt Fields. Famoso por su paisaje montañoso, los páramos y los lagos alpinos, la salva tropical, las cascadas y su abundante fauna. Nos metemos por la face en el camping que había cerca de la entrada del parque y nos tomamos una duchita caliente que ya nos tocaba después de un par de días sin conseguir agua caliente. Las provisones para nuestra última cena antes de volver al hostal: maíz, 2 latas de atún y 3 tomates. Estamos ambrientos y seguramente nos quedemos con hambre. David dice que se va con el coche y que volverá antes de la cena. Aparece media hora después y nos da una gran sorpresa llegando con 6 cervezas y un par de bolsas de doritos. La noche se anima y nos ponemos a hacer vídeos con los wallabies a oscuras y ponemos musiqueta.
Por la mañana alguien nos despierta dando golpes en el cristal del coche. El guardia de seguridad del parque natural. Al final nos hacen pagar lo que viene a ser el camping (10dolares por cabeza) y no nos ponen multa por lo que tenemos una potra increíble ya que hemos visitado muchos lugares en los que se requiere pagar entrada y sólo al final nos cogen pero aun y así nos sale el tema bastante rentable. Ya más centrados y habiendo desayunado los restos nos ponemos a inspeccionar la zona. Hay varias alternativas y una la descartamos que es la de subir al monte ya que requiere una buena caminata tipo como la de Craddle Mountain. Decidimos hacer la de 2,5 horas donde visitamos las cascadas Russell, de 45 metros de altura. Luego seguimos el camino hasta Lady Barron y las cascadas de Horseshoe. Una selva donde los árboles nos dejan realmente impresionados y las cascadas son muy bonitas.
Richmond Bridge
El mismo día decidimos visitar uno de los pueblos históricos de Tasmania, Richmond. Bordeado por el bonito río Coal, plagada de edificios del s.XIX era una ciudad de paso hasta llegar a la cárcel en Port Arthur. Hay unos pubs donde el menú pinta muy bien y al no quedarnos aprovisionamientos pues decidimos darnos el capricho de pedir un vinito blanco de la zona y un buen plato de comida después de 6 días comiendo bastante regular. Bajamos la comida visitando la St John´s Church, la primera iglesia católica del país de 1836. Y para llegar a la iglesia atravesamos por un puente construido por los convictos en 1823 y que dice estar hechizado, el Richmond Bridge. Nos pegamos una medio siesta al borde del río y nos ponemos rumbo a Hobart. Como conocemos el código de seguridad numérico para entrar al hostal sin pagar un dólar pues ahí que nos metemos a pasar otra noche en el sofá de gratis y pegarnos una ducha calentita.
Al día siguiente mis compañeros de viaje se van a sus respectivos destinos y yo me quedo una noche más, ya con mi cama incluida, hasta coger mi vuelo la tarde siguiente hacia Gold Coast, concretamente hacia Surfers Paradise.
Tasmania ha sido una experiencia impresionante por lo inesperado del viaje, ya que no tenía planeado visitarla, como por las numerosas experiencias vividas y la fantástica gente que he conocido. Hoy por hoy lo recomendaría a todo el mundo que viaje hacia Australia.

viernes, 4 de marzo de 2011

CURIOSIDADES

Camisetas del Barça vistas: 16
Camisetas del RMadrid vistas: 13
Camisetas de la Selección: 7
Cada vez me caen peor los grupos de franceses, para venir aquí en plan gueto con tus amigos y hacer la misma vida que en Francia pues te quedas allí, o coges y te vas a Lloret de Mar que el alcohol es más barato. He de decir que hay excepciones.
Me he sentido mayor en alguna que otra fiesta de mochileros, uno ya tiene una edad para hacer un pensamiento.
Ya me he leído 3 libros en inglés. Voy progresando aunque necesito subtítulos en algunas películas.
Pensaba que España era el país con más borrachos por metro cuadrado. Estaba confundido, es Australia.
Mi objetivo en las últimas semanas es hacerle una buena foto a los aborígenes en Cairns. Complicado ya que no deben darse cuenta y mi zoom es algo defectuoso.
La persona que le dijo a mi padre que en Tasmania hay caníbales que te raptan y te deboran que dé la cara porque el pobre hombre ha pasado un mal rato. Lo único que hay allí son wallabis (como un canguro enano), wombats (como un cerdo enano con cara de koala), serpientes y demás bichejos muy simpáticos.

miércoles, 2 de marzo de 2011

Adelaide, la ciudad de las iglesias?¿?¿

La llegada después de 25 horas metido en el tren fue tremenda ya que solo salir del tren el golpe de calor y a la vez de humedad hizo que le diera un buen tiento a la cantimplora.
Recogí mi maleta, no sin esperar 15 minutos, del carro que traía como 10 maletas muy parecidas a la mía y me puse en marcha. Recordaba que el google maps indicaba que mi hostal para las 2 primeras noches estaba a unos 3km por lo que la odisea prometía ser muy dura, a la postre ese sería el día más caluroso de todos los que pasaría en Adelaide. Después de preguntar a un amable australiano, como suelen ser todos cuando les preguntas una dirección, me explica con detalle como llegar a la dichosa Hindley street. Me paro un par de veces por el camino al no aguantar el calor húmedo y pegajoso de la zona. Ya llegando a la calle paro en el Mcdonalds a intentar comerme el bocadillo(vegetal) que llevaba en la bolsa/nevera que me preparé el día antes en el hostal. Al probarlo ya me voy dando cuenta de que eso no es comestible pero me puede el hambre y le doy un par de tientos más. Me pido aparte una hamburguesa y la devoro en segundos(esto me acarrearía un par de días con el estómago algo xungo). Al llegar al hostal recuerdo que no habría la recepción hasta las14h y son menos 5, me tocará esperar algo de tiempo. Pues la dichosa recepcionista aparece unos 45 minutos después con una pachorra impresionante.


Tenía reserva en una habitación de 8 y me pasan a una de 4 con baño, cocina, tv....con un ventilador escacharrao pero está vacía! esa habitación no la iba a compartir con nadie más por el momento. Por fin un apartamento para mí solo después de estar acompañado durante más de una semana por más de 6 personas en cada uno de mis alojamientos, todo un lujo y sólo pagando 20 dólares al día y con un cartón de leche en la nevera, perfecto.


Me llaman al móvil y es el chico que me encontré en una web de viajes que me dice que lleva un par de días en Melbourne y que si eso podemos quedar y vernos en algún lugar de este gigante país.
Me decidí a hacerme una lista de los lugares a visitar en Adelaide y no necesitaba mucho más de 2 días, quizás 3 si también iba a la playa. Como ya había apalabrado con el chico de Logroño lo de visitar Tasmania pues me puse a buscar vuelos rápidamente. No eran demasiado económicos pero gracias a una página web que me enseñó encontré un par de ellos interesantes para el 8 de Febrero.
Antes de nada tenía que visitar el centro de Adelaide pero comencé por ir a la oficina de turismo y enseguida descarté la opción de ir hacia Kangaroo Island que es la principal atracción de Adelaide debido a su desorbitado precio. Al volver al hostal comencé a hacer una lista de lugares a visitar: South Australian Museum, Adelaide Botanic Garden con el National Wine Centre en su interior, Central Market, playa de Glenelg y seguramente “el Oval Stadium”(soy un friki del deporte). Cuando me voy a poner ya al lío, toc-toc, tocan a la puerta de mi habitación y sorpresa! Es Jordi, el catalán con el que coincidí un día en Alice Springs. Es de Caldes de Montbui pero reside en Sabadell y es muy majete, lleva un año y medio dando la vuelta al mundo. Me dice que ha bajado en bicicleta y que ha quedado con una amiga y no tardo en prepararme e irme con él hacia el Botanic Garden donde ha quedado. Me presenta a una amiga que conoció en Asia, una australiana muy simpática, y a sus amigos made in Taiwan. Estamos paseando por el jardín botánico y lo atravesamos hasta llegar al río Torrens donde hay un bonito paseo. Cuando comienzan a planear sobre ir a cenar a un Vietnamita yo me retiro y quedo con Jordi el día siguiente para dar una vuelta y quizás cortarme el pelo con su maquinilla eléctrica de afeitar, esto promete…
Al día siguiente me levanto algo tarde por lo que descarto el tema de playa y me pongo a hacer la ruta de la Loly Planet. No sin antes perderme un rato, comienzo por el final de la ruta y visito algunos de los edificios y lugares más famosos del centro de Adelaide: La estación de ferrocarril, el Adelaide Festival Centre, el Parlamento, la Universidad de Australia Meridional, el Ayer Historic House que es un edificio de 1845… Me detengo el museo de Australia del Sur, es domingo y está lleno de familias visitándolo y es gratis por lo que me meto sin pensármelo. La planta baja comienza con un esqueleto gigante de ballena y luego hay reproducciones a escala natural de los animales más famosos de cada continente, la 1ª planta es dedicada a los aborígenes por completo, la 2ª a meteoritos recogidos en Australia, minerales y piedras preciosas y reproducciones a escala de dinosaurios que habitaron Australia en aquel tiempo. La 3ª planta, la que más me gustó, reproduce todo tipo de fauna Australiana disecada acompañada de pantallas donde de forma táctil puedes ver las características de cada animal o insecto, muy curioso. Creo que en España este tipo de museos podrían despertar en los niños la curiosidad y el respeto por la biodiversidad autóctona como ya pasa aquí en Australia.

Me voy al borde del río Torrens a hacer la siesta aunque no lo consigo del todo y me decido a tirar hacia el Oval Stadium. He escuchado que se suelen disputar partidos internacionales de cricket de gran importancia. Una vez allí, me meto dentro sin preguntar al guardia de seguridad y me siento a ver el cricket tan tranquilamente. Muy aburrido pero el estadio es bonito y ya aparece Jordi con su bicicleta y vamos a tomar algo por ahí no sin antes tirarme unas fotos.
Nos damos un homenaje y pedimos una jarra de 12 dólares de cerveza y nos ponen un poquito más de un litro, suficiente. Quedamos en que el día siguiente yo me voy a la playa y él después viene hacia mi hostal y me cortará el pelo, miedo me da.
Cojo el tranvía hacia Gleneg Beach y a medio trayecto el revisor pasa 1x1 a cobrarnos unos 2,6 dólares, que barato!! La playa es muy bonita y me tiro a leer en la arena y me meto 3o4 chapuzones. El agua transparente, no dan ganas de marcharse nunca pero ya van siendo más de las 16h y quedé en estar antes de las 17h en el hostal. Cojo el tram y tiro hacia Adelaide centro cuando a medio trayecto el revisor viene y le doy justo los 2,6 dólares. El hombre se me queda mirando como esperando a ver que pasa y al ver que no reacciono me dice que son 4,8 dólares. ¿Estará de broma el abuelo? Me comenta que a partir de las 16h la tarifa es esa, que engaño…enfín que le pago y me quedo con 5 céntimos en el bolsillo. Ya estaba mirando a la señora de al lado por si no me llegaba pero me llega justito.
Ya en el hostal aparece Jordi con la maquina y sólo encenderla la pila comienza a flojear. Total que piyamos la del mando de la tv y se pone al lío. Parece que tiene mucha maña y se maneja bien. Me deja medio decente ya que no había por donde coger la cabellera que tenía y me deja varias zonas como por debajo de la oreja con algunos pelacos, que más da, soy un nómada y a estas alturas me da todo igual. Charlamos un rato y vamos a dar un voltio por el centro, el llamado Mall cerca de Williams Street tocando con Hindley street. El Mall en todas las ciudades australianas existe, viene a ser como una calle solo peatonal donde está concentrado todo el comercio, los músicos se ponen a tocar en la calle, los aborígenes se ponen a beber en las esquinas, los mendigos y alcohólicos te piden dinero no sin antes presentarse y preguntarte que qué tal estas, que que haces en Adelaide….lo típico antes de pedirte unos dólares pero yo con todo lo catalán que soy me voy a ir de Australia sin soltar 5 céntimos a nadie de regalo, que lo he sudado yo con mi trabajo este dinero y encima no puedo currar en Australia.
Me despido de Jordi, no sin alguna pena, y quedamos en vernos en Barna o quizás en Tasmania si se decide a ir pronto aunque difícil porque tiene que estar aún más tiempo en Adelaide, luego Melbourne, imposible.
Me preparo el mochilón y tiro hacia la parada de bus para ir al aeropuerto, solo 2 dólares, lo más barato que he visto en Australia.
Mi vuelo: Adelaida-Melbourne(recojo al colega de Logroño, David)-Hobart(Tasmania). Creo que paso los 2 vuelos durmiendo y leyendo algo aunque no demasiado. Nuevo destino, nuevas historias, nuevos amigos.
Buen recuerdo aunque breve me llevo de los 4 días en Adelaide. Muchas iglesias y a la vez numerosos club de striptease por todas partes, buena combinación.

jueves, 17 de febrero de 2011

Tour de 3 días (Kings Canyon, Olgas, Uluru)


El primer día nos recogían sobre las 6 menos diez en el hostal. Luego fuimos haciendo ruta por todos los hostales recogiendo a toda la gente que estaba que venía en nuestro mismo tour. Salimos unos 5 de mi hostal y luego recogimos como a 15 más, entre ellos 2 personas con las que hice amistad enseguida. Curiosamente eran de Tel Aviv y no pude resistirme a contarles que los peores pasajeros del aeropuerto para la mayoría de trabajadores del Prat son los del vuelo a Tel Aviv. Luego se montaron un grupo de 3 holandesas que parecía que aun no habían dormido por la marcha que llevaban en el cuerpo al entrar a las 6 de la mañana en el minibus.


Nos pusimos rumbo a Kings Canyon ya que las siguientes 4 horas de bus prometían ser muy duras aunque a la postre resultaron ser muy entretenidas ya que nos pusimos a charlar todos enseguida y a poner nuestro nombre en la ventana que correspondía a nuestro asiento con rotulador y debajo del nombre el apodo. Yo me puse Rafa Nadal (se estaba celebrando el open de Australia y la coa pintaba bien...)y desde entonces el guía se dirigió hacia mi nombrándome Rafa.
Llegamos a pies de kings Canyon haciendo una parada en una gasolinera que hacía a la vez de granja donde vimos por primera vez Emus que vienen a ser como avestruces gigantes y comenzó la invasión de las moscas cojoneras.
Tras la advertencia del monitor sobre la dureza del camino, unos 6o7km a 45/47grados en la base del cañón donde la roca acumula todo el calor, cogimos nuestros 3 litros de agua y comenzamos la caminata subiendo un muro de escaleras de piedra con una pendiente tremenda de unos 100 metros. Algunas personas se marearon un poco y paramos hacia la mitad a la sombre de un árbol durante unos minutos para así coger aire y beber agua. Al llegar arriba del cañón vimos la espectacular y hicimos fotos desde allí a la vez que el guía no explicaba algo sobre la flora y la fauna y la formación de las rocas.
después de subir unas escaleras de madera criminales llegamos al jardín del Edén donde disfrutamos de una sombra perfecta y un lago en medio donde nos metimos un chapuzón de media horita antes de continuar el camino.

Al bajar ya nos dirigimos a comer a un merendero ya pasamos la tarde de camino hacia Kata Tjuta (los Olgas) parando en el camino a recoger leña para hacer la hoguera de la noche. Paramos en una explanada cuando ya era bastante oscuro y en un plis la hoguera estaba hecha y nos pusimos a beber unas cervezas (las conseguimos por solo 2,40dolares!!) y a cenar. Después cogimos los sacos y a dormir al raso mirando las estrellas.
Ya el segundo día amanecimos con la primera luz del día y flipando con las bandadas de pájaros de todos los colores que ayí nos íban cubriendo el cielo. Desayunamos unas tostadas que nos había preparado nuestro guía, y ya amigo, Dylan y nos pusimos rumbo a Katja Tjuta (Los Olgas).
Ayí nos pegamos otra pateada, ya menos fuerte que la del día anterior, y paramos varias veces para beber agua y picar algunas chucherías que tenía un amigo inglés que compartió generosamente con los demás. Al ser el día de Australia la fiebre por hacerse fotos con la bandera no cesó en todo el día pero fue muy divertido ya que Dylan nos prestó su querida bandera numerosas veces para echarnos fotos individuales, en grupo, etc, etc. Comimos unos royos que aquí los reyenan con chili con pepper o algo así le llaman, pero vienen a ser judías picantes de estas de los burritos con lechuga, tomate y toda clase de guarradas pero que lo devoramos como depredadores. Después de disfrutar de los Olgas nos dirigimos al camino que rodea Uluru y ahí ver las pintadas aborígenes.  Dylan nos explicó el significado de cada pintura y vimos los escondites en la pared donde escalaban para protegerse del ataque de los dingos y otros depredadores en las cuevas donde vivían los aborígenes. 
Pronto nos dirigimos al mirador donde vimos el sunset en la roca deleitándonos con las diferentes tonalidades que esta iba tomando mientras que el sol iba desapareciendo. Cenamos ayi y posteriormente fuimos a una especie de camping con duchas(después de 2 dias sin ducharnos...) y zona de barbacoa y poquito más. Después de la paliza el 50 % de nuestro grupo se fue a dormir quedando el grupo de holandesas, Daniel(el de Tel Aviv), mi amigo aleman Fabian, una canadiense muy simpática que había vivido en Burriana (cerca de Castellón, alucinante), un chico de 18 años Suizo con el que bromeaba sobre jugadores históricos del fútbol suizo y yo mismo, como siempre, el último en acostarme.
Hicimos mil juegos contra el grupo del otro bus y finalmente empatamos. Bebimos cada uno como 4/7 cervezas ya que habían sobrado de la gente que dormía y nos dieron las tantas hablando. Luego apenas pude dormir ya que sentía un raro cosquiyeo en la espalda como si una hormiga subiera y bajara continuamente y a las 4 nos levantaron para ir a ver la puesta de sol en el mirador de la roca(Uluru) donde hicimos 3000 fotos y desayunamos peleando con las moscas continuamente. Volvimos a Urulu para rodear la roca, otro largo paseito y la gente que quisiera escalarla también podía hacerlo aunque nos recomendaban encarecidamente que no lo hiciéramos ya que era un lugar sagrado para los aborígenes de la zona y se podían sentir mal por lo que solo 3 personas subieron a la cima del monte Uluru. Rodeando la roca me sorprendí de que mis amigos israelíes conocieran mucho a Julio Iglesias y hasta me cantaban algún pequeño estribiyo de sus canciones, sin palabras...
Después de la caminata nos pusimos dirección a Alice Springs otra vez. Paramos para comer en una gasolinera otra vez royitos pero también nos comimos la pasta del otro grupo ya que al parecer no eran tan fieras como nosotros comiendo. Luego hicimos el último stop en la Camel Farm donde podías subirte a un camello (yo no lo hice) y vimos dingos (una especie de perro lobo), emúes y camellos recién nacidos.


Llegamos a media tarde al hostal y quedamos una hora más tarde en el pub/restaurante que había al lado de la oficina del tour. Allí pudimos compartir experiencias, risas y nos contamos nuestros próximos destinos en Australia. Dylan nos hizo un par de trucos con un bolígrafo y nos empeñamos en imitarle toda la noche sin lograrlo. Fue marchando toda la gente y quedamos solo 4. Nos dirigimos a una especie de club que había alado y allí pasamos un buen rato sorprendidos viendo aborígenes bailando de forma muy curiosa las canciones que suelen sonar en las discotecas de Australia y allí reímos hasta bien entrada la madrugada. Nos repartimos nuestras direcciones en el facebook y volvimos, ya solo 3, hacia el hostal con un acojone considerable al ver pasear y gritar como zombies a numerosos aborígenes que llevaban una buena borrachera por la calle y parecían que en cualquier momento nos podían atacar. Llegamos sanos  salvos al hostal y enseguida ya estábamos durmiendo.